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Euonymus fortunei


Evónimo - Bonetero rastrero

Es uno de los arbustos perennes de jardín más bonitos y excelente para la formación de setos bajos o medianos.

Originario de Japón, se trata de un arbusto con una amplia variedad de cultivares y que cada uno puede tener unas hojas con formas y coloraciones muy distintas.

En la actualidad existen numerosas variedades que se venden en macetas como excelentes plantas de interior.

Tienen la ventaja de que son fáciles de cultivar y mantener para la decoración de interiores, pudiendo trasplantarla cuando se desee en el exterior.

Dependiendo de la variedad nos encontramos con Evónimos de crecimiento enano, hasta los que pueden superar los 3 m de altura.

Se trata de una planta de rápido crecimiento, que absorberá los nutrientes de su emplazamiento con celeridad, por lo que requiere ser abonada durante todo su crecimiento cada diez días.

Es muy resistente, aguanta tanto las altas como las bajas temperaturas, siempre y cuando le proporcionemos los cuidados que necesita. Requiere de un emplazamiento soleado para poder crecer sin problemas.

No precisa ningún tipo de protección a lo largo del invierno, aunque se encuentre a la intemperie: sólo hay que proteger a los ejemplares jóvenes.

Produce al final de la primavera ramilletes de pequeñas flores de color crema o amarillo verdoso, pero son de de escaso interés ornamental.

Las variedades con hojas variegadas siempre deben situarse a pleno sol para acentuar los colores.



Esta es una planta que necesita de riegos abundantes, sobre todo durante el verano, cuando requerirá de un riego cada pocos días.

En otoño bastará con humedecerla cuando se observe que el sustrato está seco, en su época de reposo invernal simplemente requerirá de riegos esporádicos.

En semi-sombra o sombra es muy susceptible al hongo oidio, las hojas se cubren como, de un polvo blanco.

Tiene buena resistencia y tolera casi todo tipo de suelos, pero es imprescindible que sean porosos, estén bien drenados y no acumulen agua.



Se puede tratar con fungicida sistémico. El fruto es una vaina como una baya que se encuentra abierta enseñando sus semillas que están rodeadas de una pulpa carnosa.

El Evónimo se multiplica fácilmente por estacas de madera dura al principio de primavera.

Todas las partes de la planta son venenosas para los seres humanos si las ingieren.

Contiene un alcaloide que puede provocar trastornos cardiacos y neurológicos en algunos casos.





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