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Brugmansia arborea


Datura - Trompeteros

Es una de las plantas de flor más espectaculares y muy poco exigente en sus cuidados.

Las flores son muy aromáticas, tienen forma de trompeta y son las de mayor tamaño entre las de los arbustos de jardín, llegando a medir hasta 50 cm de longitud.

Pueden ser de muchos colores, desde el blanco al amarillo, pasando por el salmón, pero siempre en tonalidades pastel.

También hay hermosas variedades de flor doble, mostrando una trompeta dentro de otra.

Se conocen popularmente como Trompeteros y son en general, de cultivo extremadamente fácil y crecen con gran rapidez.

Sólo son exigentes con el riego en periodos de desarrollo, especialmente durante los meses más calurosos, pero permiten algún descuido.

Todas las variedades de Brugmansia tiene porte arbustivo o de pequeño árbol, con alturas que suelen oscilar bastante dependiendo de la variedad, entre el 1´5 hasta casi los 5 metros, si se cultiva en maceta tendrán un tamaño mucho menor.

Mientras el ejemplar sea joven y de porte pequeño se debe mantener en un lugar resguardado del fuerte viento, porque pueden sufrir las ramas y las flores.

En los climas cálidos florece gran parte del año, una poda ligera ayuda a conseguir una floración más abundante.

En las zonas de temperatura fría, las podas regulares servirán para limitar el crecimiento y estimular la formación de brotes de floración para la próxima estación.

Durante los meses que haga mucho frío o heladas, los vástagos o tallos más tiernos pueden morir, pero esta planta se regenera con facilidad en primavera.

La Datura necesita una gran cantidad de nutrientes para florecer, por ello hay que abonarla cada diez días aproximadamente.

Si se cultiva en maceta alcanzará en breve tiempo los 2 metros, por lo que necesitará una maceta bastante grande para que pueda desarrollar un sistema de raíces sólido y que sirva de contrapeso a su parte aérea.

En el momento que la planta crezca demasiado se le puede realizar una poda drástica antes de que inicie el crecimiento en primavera.


Si ya no se desea cambiarla de maceta por ser esta muy grande, se quita cada primavera la capa superior del sustrato y se sustituye por uno nuevo.

Los tallos de las podas se puede aprovechar para multiplicarlas, florecerán en menos tiempo que los ejemplares obtenidos a partir de semillas.

Es importante saber que estas plantas son altamente tóxicas y en ningún caso hay que dejar que los niños las manipulen.

También es conveniente lavarse bien las manos tras su manipulación, así como las herramientas empleadas.





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